miércoles, 7 de julio de 2010

Nuevo campeón a la vista

El mundial de los batacazos

El que llega mejor se queda. Parece ser ese el lema de la presente copa del mundo, un torneo donde los equipos que mejor se mostraron durante la fase de grupos y demás instancias, terminaron sucumbiendo ante cuadros que, aunque iban mejorando, lo hacían a paso lento y sin convencer. De eso Holanda sabía y mucho, pocos días antes se había tumbado al que para muchos iba derechito al título, Brasil. La 'Naranja Mecánica' no había tenido partidos brillantes, mostraban sí un orden defensivo interesante, buen tránsito de balón y sobre todo mucha efectividad, pero teniendo los jugadores que tiene no había sido la vedette ni mucho menos de su grupo. Pasó porque era un grande y punto, sin embargo ante los charrúas, quienes para mí venían mejor más allá del complicadísimo choque ante Ghana, los holandeses jugaron hasta el momento su mejor partido, ordenados atrás, rápidos en el tramo defensa - ataque, tratando bien el balón y siendo más efectivos que nunca de cara al gol. Por fin brilló Robben y finalmente Sneijder convenció al mundo entero de que puede convertirse en la gran figura del mundial. Los celestes, por su parte, apelaron a su importante historia y nunca bajaron los brazos, contribuyendo a que el partido tenga vibra hasta el final, cuando se marcó el descuento y de inmediato se lanzaron todos al arco de Stekelenburg a buscar ese milagro que finalmente no se dio. Pitada la culminación del encuentro empezaron los festejos y las lágrimas en un marco de gran partido, donde el ganador fue el justo ganador, y el perdedor terminó reconociéndolo. Aún con eso me parece que lo hecho por Forlán hasta ahora en Sudáfrica es insuperable. Holanda finalista y veremos si de una vez por todas concreta ese campeonato que siempre le fue esquivo.

Un día después España tenía que vérselas con el otro gran candidato, Alemania. Los germanos venían de hacerle cuatro a la Argentina de Maradona, cuatro a la Inglaterra de Capello, y sin desmerecer a los australianos pues también al equipo oceánico le cayó su goleada. Mientras que España era un conjunto especialista en insinuar, en amarrar la pelota con ese mágico medio campo, pero que no verticalizaba lo suficiente como para decir que tenía pinta de campeón. Hoy la "furia roja" jugó su mejor partido, no sólo el de la copa, sino quizás el de su historia, dominando por completo a un cuadro teutón que se vio sorprendido y que no tuvo las respuestas que todos esperábamos que tenga; no brilló Özil, no brilló Schweinsteiger, y los delanteros casi no tuvieron claras; además de la ausencia de Müller, la cual se sintió en cada segundo del vibrante encuentro, el cual los hispanos dominaron a placer, teniendo más la pelota y no sólo eso, sino además generando ocasiones de gol que de no ser por la acertada defensa alemana pudieron haber aumentado, y con justicia, la cuenta. Finalmente, cuando parecía que a pesar del dominio España no iba a poder concretar la victoria durante los noventa minutos, apareció el "diferente" de este equipo, y esta vez "diferente" tiene una connotación distinta, y es que ante tanta riqueza técnica y creativa, Carles Puyol resulta ser, por así decirlo, la "oveja negra" de esta selección ibérica, pero poco importa eso cuando el pundonor se impone y el cabezazo fue simplemente sensacional, un cabezazo de defensor, un cabezazo de Carles Puyol; nada que hacer para Neuer y a celebrar. A sus 32 años quizás sea este el momento más importante en la carrera del ya mítico número 5 del Barcelona, acostumbrado más a evitar goles que a hacerlos, pero vaya que es una buena forma de salir de la costumbre, ya que ese gol puso a España como finalista de una copa del mundo, por primera vez en su historia.

Los partidos que se vienen tendrán matices distintos, aunque eso ya es propio de cada mundial; mientras España y Holanda disputarán el título en una final imperdible, un día antes uruguayos y alemanes jugarán ese partido que, se dice, nadie quiere jugar, pero que al final igual se juega y con todas las ganas, para ganarse un lugar en el podio; aunque lo cierto es que estos cuatro equipos, por lo mostrado, ya están en el podio personal de todos los hinchas del fútbol.

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