El mundial del aburrimiento

¿Extinción casi definitiva del "jogo bonito"?

Es una tarde fría limeña y acaba de terminar el partido entre Inglaterra y Argelia; el resultado, como ya sabrán, fue de 0 a 0, una constante que se ha venido dando durante todo el mundial, salvo algunas sagradas excepciones. Y es que en realidad lo que va de este gran certamen al que cada 4 años todos se mueren por ir, me ha resultado bastante aburrido, casi somnífero, y no lo digo necesariamente por la hora (peruana) en la que empieza la programación. No sé si será sólo mi impresión, pero me parece que el "factor Mou" está comenzando a cobrar fuerza. Gracias a este nuevo sistema que tan buenos resultados le ha dado al amado-odiado técnico portugués, muchas selecciones parecen querer emular su planteamiento conservador, ultradefensivo y archirrecontrasuperaburrido: empezando por la premisa básica, conservar el cero. Pero al parecer esas malas imitaciones tienen consecuencias devastadoras en el ojo del hincha, ya que algo que no podemos negarle a Mourinho es que sus equipos gozan de una eficacia mordaz, y además de un despliegue físico que por momentos emociona; en el Mundial, sin embargo, sólo se están preocupando por esa primera regla, mas en el momento de generar ocasiones de gol se pone como prioridad no cagarla; eso hace que los delanteros no sepan si su lugar está realmente en el área rival o si mejor se quedan en un limbo que les permita regresar rápido en caso el contrincante ejecute un peligroso contraataque.

Lo táctico prima sobre lo fantástico y si pensaban que Brasil nos salva siempre de esas maledicencias se equivocaron; Dunga es otro seguidor de Mou, y vaya que lo ha demostrado al convocar a prácticamente cinco volantes de contención, despreocupándose y mucho de las funciones de ataque donde Kaka' y Robinho no tienen reemplazantes naturales. El ex defensor y capitan carioca dejó de lado la convocatoria de Ronaldinho Gaucho y Alexandre Pato, quienes eran por lo menos fijos en Sudáfrica gracias a sus buenas campañas en el Calcio. Una victoria de temperatura tibia sobre Corea del Norte aprueba con 11 el examen, pero aún quedan muchas dudas. Lo de Alemania fue lo más sorprendente y lo digo por los dos partidos que jugó. En el primero mostró facetas que no parecían propias de Europa, basándose en la habilidad de Oezil y en las trepadas de Lahm. En el segundo mantuvo la fórmula pero se encontró con un Serbia que no creía en historias, le hizo el pare y se mostró eficiente, luego mantuvo un orden y jugó al contragolpe, pudiendo incluso haber hecho más dolorosa la derrota. Aún con estas dos dispersas presentaciones, sigo pensando que Alemania es uno de los pocos cuadros que le dan color al mundial.

Lo de España para mí no es sopresa, es otro equipo que se unió a las filas de los conservadores, aquellos que abusan de la táctica, que circulan demasiado el balón, pero que nunca atacan con propiedad, que no demuestran los huevos necesarios para anotar un gol, o al menos para generarlo. Suiza en cambio fue inteligente, sabía que España los subestimaría, lejos de sentirse menos hicieron que los españoles se creyeran el cuento y cuando tuvieron una la metieron y a llorar al mar ibérico. Argentina ha demostrado un gran poderío ofensivo pero sigue teniendo a Messi en deuda. Francia es una lágrima total, el sólo hecho de hacer cambios tácticos en pleno mundial demuestra lo improvisado del trabajo de Domenech, quien para mí tuvo que haber abandonado el cargo después del mundial pasado. Inglaterra es otra decepción, aún no gana teniendo los jugadores que tiene, ¿Y Joe Cole?, ¿Capello será otro seguidor solapa de Mou?.. La garra charrúa de Uruguay está a un paso de clasificar a octavos, y es el único conjunto que no ha presentado novedades, sigue jugando a su estilo, a la uruguaya, a no dar ni un balón por perdido, y cuenta con un maduro Forlán que hasta el momento es la gran figura del mundial. México sí me parece sorpresivo, los charros supieron aprovechar el mal momento de Francia y están también a muy poco de sellar una clasificación inesperada, en un grupo donde está también el anfitrión, a quien no habría que descartar. Italianos y Paraguayos son dos ejemplos tradicionales de fútbol táctico y aguerrido, pero les salió un partido discreto donde el empate fue lo más justo. Nunca descartaré a la "forza azurra" pero me parece que no tiene ni la mitad del equipo que campeonó en el 2006.

Párrafo aparte para mi favorito (y no exagero), Chile. El opuesto a todo lo visto hasta ahora en la justa mundialista. Un cuadro que ataca frenéticamente los 90 minutos, que tiene un ritmo impresionante de principio a fin, y que no se cansa de hacerte goles. En el choque contra Honduras quizás les traicionaron los nervios y los mapochos se mostraron muy ansiosos, pero el sistema táctico es convincente, es agrabable, emocionante, generoso y de lejos lo mejor que he visto en Sudáfrica. Sólo es cuestión de que el 'loco' Bielsa (quien, apostaría, jamás sería amigo de Mourinho) inyecte un poco de calma en su plantel para que los partidos que vienen los pase con tranquilidad. Sin embargo lo de Alexis Sánchez, ansioso y todo, es sencillamente impactante, lo mismo que los delanteros, volantes mixtos y laterales, quienes se suman al ataque formando prácticamente una ola roja. Lo mejor es que han desarrollado tanto los relevos como la velocidad, lo que les permite pasar rápidamente de ataque a defensa, y así evitan quedarse indefensos ante algún contragolpe rival. Un equipo completo, solidario y que me parece se merece ser llamado "candidato" por lo mostrado.

Lo demás hasta ahora resulta incierto. Los planteamientos defensivos de los "grandes" han hecho que los "chicos" propongan juego ofensivo y por eso las sorpresas, las cuales seguramente seguirán dándose a lo largo del torneo. Tema aparte también es la nueva pelotita FIFA, la cual está dando que hablar por sus rápidos piques y sus botes irregulares; si bien es cierto no es excusa para algunas fallas netamente técnicas en los arqueros, podría decir también que este nuevo balón condiciona a los jugadores a tener mucha precisión y sobre todo sentido de intuición para lo que podría pasar después de una jugada.

Como hincha sólo me queda desear que por favor el poder superior nos dé una manito y que este mundial SEA UN POCO MAS EMOCIONANTE. Más allá de lo que nos puedan vender los periodistas este torneo está como para quedarse jato y ver los resultados por internet. Parece, señores, que este es el fin de "jogo bonito" del que tanto presumíamos los sudamericanos.

GRACIAS, MOURINHO.