... y esto fue lo que me dejaste.
Se termina un año más. Una mezcla de alegría y temor invade mi maltrecho ser. Se me vienen los 29 añitos. Se supone que a esta edad ya debería estar encaminado, es decir, con una buena chamba, con, por lo menos, un proyecto de novia, y generando los últimos pasos de mi independización. Pero no es así. Sigo sintiendo que soy un niño en algunos aspectos, en otros no sólo me siento hombre, sino un viejo absoluto. Quizás este 2011 me ha servido para concluir y tener diversas hipótesis sobre todo lo que sucede en mi entorno. Para eso, me sirve y mucho hacer esta suerte de anuario. Sin más ni menos, aquí lo que me dejó este año, adornado por el siempre dichoso "de todo un poco". Ajado y parchado, digno y delincuencial. Maravilloso y genuino.
En lo profesional
Tuve mi primera experiencia formal como "educador". No precisamente como profesor, sino como tutor de un prestigioso colegio pre-universitario. Pamer es mi alma máter en mis tiempos de academia, era un sueño casi perdido trabajar ahí algún día. Sí, aunque sabía que ganaría poco, tenía en mis planes hacer algo ahí, lo que sea, tutor, profesor, delegado, asistente, recepcionista (no es broma). Tenía que devolverle algo de lo que me dio alguna vez, y qué mejor que hacerlo trabajando. La experiencia tuvo diversos matices. La institución se me cayó en lo administrativo. Parece que sus métodos motivacionales para con los empleados no tienen tanta relevancia como los que nos exigen a los tutores para con los alumnos - debería ser la misma. Al final, la directora acabó algo decepcionada de mí y yo con ella (seguramente mucho le interesa), pero no me cerraron las puertas para un posible retorno este año. La mejor recompensa fue aquella despedida el último día de clases, cuando aquellos alumnos a los que puteé durante todo el cuarto bimestre, se me acercaron todos juntos en un abrazo tan chúcaro como tierno. Hoy, es con ellos con quien no he perdido el contacto.
En lo familiar
Una antigua herencia de mi madre cayó del cielo, parecía que el 2011 sería el despegue de los Ravelo Ruljancic, pero tendremos que esperar un poco más. No entraré en mayores detalles, sólo quiero expresar que, si bien tengo la habilidad de mantenerme al margen de todo (o aparentarlo), he estado siguiendo todos los pasos de esta epopeya, y quiero decirles, viejo y vieja, que contarán conmigo cada vez que me necesiten de verdad, insisto, DE VERDAD.
Como grone
Este ha sido el aspecto en el que mejor me ha ido en el año que ya se fue. Viajé, conocí mucha gente y alenté a Alianza en las buenas y en las malas. Por si esto fuera poco, tuve el acierto de juntarme con dos maravillosos hinchas que, además de haber demostrado en el estadio su incansable amor por la blanquiazul, tienen un gran talento como comunicadores y poseen ideas que podrían cambiar el rumbo de nuestro querido club. Antiguos amigos, hinchas grones, se unieron también a la causa (gracias, de verdad), teniendo como cereza de la torta a un seguidor que ahora yo sigo, un hincha de raza nacido en la popular Svr y que ahora nos apoya con sus ideas y sugerencias. En resumen, somos un equipazo. Sígannos en "El Blog Íntimo", ojo, también en Facebook.
En el amor
Pasó un año más sin encontrar a alguien con el nivel de tolerancia y valentía para convertirse en mi compañera. Amagues hubo algunos, pero parece que nadie quiere besar al sapo que desea convertirse en príncipe (no me hagan caso, es que estuve viendo "La princesa y el sapo"). Fuera de bromas, fue un año muy tranquilo en el aspecto amoroso. Y para los (las) que no se expliquen porqué no tengo pareja, les doy una clave: No estoy buscando pareja. Creo que así es mejor, ¿o no?, veremos si de este año paso.
Deseos para el 2012
A ver, insisto en que estos deseos no obedecen al orden en cuanto a importancia, simplemente los pongo así porque así se me ocurren.
Primer deseo: Pasar un cumpleaños feliz.
Segundo deseo: Que se arregle la situación de mi familia y de una puta vez por todas despeguemos. Nos lo merecemos.
Tercer deseo: Seguir viajando con barras aliancistas.
Cuarto deseo: Que mi Alianza no me haga sufrir tanto (creo que este deseo es el más vano de todos).
Quinto deseo: Comprarme el 'Legend of Zelda - Skyward Sword'.
Sexto deseo: Bajar unos cuantos kilos.
Sétimo deseo: Conseguir un trabajo decente.
Octavo deseo: Volver a estudiar.
Noveno deseo: Conocer más chicas lindas (pero que no sean tan efimeras, POR DIOS).
Décimo deseo: Que El Blog Íntimo llegue a los diez mil seguidores en FB, y nos convirtamos en la mejor alternativa de aliancismo objetivo.
Undécimo deseo: Seguir amando sin restricciones.
Decimosegundo deseo: Que las bebes sigan creciendo y me hagan cada vez más feliz.
Decimotercer deseo: Seguir escribiendo y leyendo nuevas e interesantes cosas.
Decimocuarto deseo: Que, al terminar este año, sienta que llego a la mitad de mi vida (siendo generoso) habiendo vivido al menos la mitad de lo que tengo por vivir.
Decimoquinto deseo: Un feliz 2012 para todos, amigos o enemigos, rivales o compañeros, ex novias, choteadoras, amantes, vacilones, chicas cachetada. Todos somos parte del mismo show, y todos merecemos ser felices. Y si este año será el fin del mundo, entonces, ¿qué esperamos?
A vivir.
Y yo que bitch?
ResponderEliminarJajaja, por ahí podría haber un decimosexto que diga que David ingrese, les conviene xD.
ResponderEliminar17.- Que el negro Christian se case!!!
ResponderEliminar